El Líder en el Cambio

Es todo un reto en los tiempos actuales liderar un proceso de transformación.

Son varios los elementos que directamente afectan el cambio en un proceso de esta naturaleza: el primero es la incertidumbre y volatilidad, cada vez más presente en los negocios. Ello hace que los lideres no dispongan probablemente de toda la información que necesitan antes de tomar una decisión.  A ello hay que agregarle, que los tiempos se abrevian y no se dispone tampoco de todo el tiempo necesario para asegurarse si el diseño del cambio es “suficientemente bueno” como para garantizar un resultado. Eso requiere que ese líder transformador tenga claro el enfoque y a donde quiere llegar, debe conocer profundamente las personas implicadas en esa transformación y la esencia cultural de su organización y manejar adecuadamente los recursos que dispone para llevar a cabo el proceso. A lo largo del mismo, deberá aprender a ser más adaptable para aprender a aceptar determinadas circunstancias, que, de abordarlas en ese momento, pueden suponer un claro obstáculo para el avance del proyecto.

Para ser capaz de ello, el líder de un proceso de transformación deber ser un “líder visible” y con intensidad. Esto significa que inyecte el ritmo del cambio y que sea un líder que “esté en el frente”, que es capaz de monitorear los resultados y el desempeño de cada uno de los participantes en el proceso. Ello le aportará altas dosis de confianza y credibilidad absolutamente indispensables en una transformación.

Y lo más importante, el líder en un proceso de transformación debe saber encontrar los apoyos adecuados y generalmente eso no pasa por tener “una legión de consultores” sino de rodearse de profesionales que ya lo han hecho, que han atravesado “esas aguas” y que son capaces de llevar al líder a buen puerto, contribuyendo a dar forma a la agenda de transformación de una manera rápida y efectiva, para beneficio de todos.